Dulce María Loynaz-Tercera y última parte






María de las Mercedes Loynaz Muñoz, conocida en el mundo de las letras como Dulce María Loynaz cubana de nacimiento, caracterizó su poética amorosa
con la ausencia del erotismo; entonces ¿Qué es lo que más nos seduce de su obra...?


Quizá, entre otras cosas, sea la recreación de ambientes mágicos, de medios
tonos entre luces y sombras desprendidos de universos etéreos, distantes,
imprecisos y a veces intangibles.
Se nota la fuerza del mar, de la naturaleza llamando a su pluma en cada verso.
Hasta edad avanzada –recordemos que vivió 92 años- jamás dejó de escribir sólo se lamentó de no saber usar la máquina de escribir y de no servir para dictar sus textos.


En 1986 recibió el premio Nacional de Literatura de su país, en 1991 el Premio de la Crítica y en 1992 el premio Cervantes, convirtiéndose desde entonces en directora de la Academia Cubana de la Lengua.